PAYAMEDICOS

IV CONGRESO INTERNACIONAL DE PAYASO Y CLOWN DE HOSPITAL organizado por los PAYAMEDICOS de ARGENTINA.

Esta fue una de las más grandes satisfacciones que tenido en mi carrera artística, haber sido convocado por mis admirados PAYAMEDICOS, por sus autoridades máximas, el presidente Contador Héctor Bruno y su mentor y director artístico el genial y querido Dr. José Pelluchi, para mí ha consituído un inmenso honor, un gran orgullo, no tengo palabras para definirlo, ser considerado en mi arte para integrarlo a una actividad tan pero tan importante como la de aplicar una técnica de arte a la ciencia.

Para ello brindé una conferencia titulada VENTRILOQUIA CLASICA APLICADA A LA CIENCIA, y un taller de INICIACION A LA VENTRILOQUIA para profesionales en medicina, artistas e interesados ligados a la actividad Payamédica de Argentina y del mundo.

Se trata de la ciencia médica, nada más ni nada menos, en el tratamiento de la enfermedad a partir de la voluntad del paciente, de influir en su interior, mejorar su calidad de vida, en principio los destinatarios con los pacientes con dolencias más severas, y no se trata como muchos creen que estos médicos aprenden a divertir a los pacientes con magia, humor o malabares, es todo un estudio científico aplicado a que mediante esa habilidad personal del profesional pueda llegar a puntos que originan situaciones difíciles con los sufrientes pero además con la familia del mismo que comparte la misma situacion dolorosa aunque no sea en carne propia.

Los Payamédicos deben realizar cursos para poder ser Payasos o Clown de Hospital, su siencia médica se potencia y se complementa con el arte, caminan por una misma senda, y la unión de estas dos características, la ciencia y el arte hablan además de una vocación inclaudicable de la mujer o del hombre cienctífico, profesional en medicina o ciencias vinculadas, porque no se conforman con su conocimiento sino que apelan a algo que parece o tal vez sea extraño como la de convertirse y desdoblar su personalidad conviritiéndose además en artistas.

La ventriloquia va más allá todavía. Lo puedo asemejar en sus resultados, al que se obtuvo con pacientes down al vincularlos con animales, especialmente caballos, con un terrible éxito.

En el caso nuestro, el ser humano afectado, niño, adulto, geronte, confía en su médico pero siempre existe la cuestión personal humana que muchas veces cuesta desprender de uno mismo, pero cuando se trata de confiarle algo a un muñeco que no tendrá respuestas, que aceptará todo sin excusas, que tiene un parecido al ser humano pero no sus defectos, tiene fantasía, dulzura, inocencia, eso lo advierte el paciente es muy probable que le cuente un secreto o que le admita un consejo. O sea, el profesional, utilizando la ventriloquia, hace que el muñeco sea quien lo convenza de algo que tal vez él no puede lograr, el muñeco es más confiable.

Esa es la conclusion que obtuve en este trabajo que recién comienza junto a los Payamédicos y que prometo entregar lo mejor de mí para ayudar no tanto a ellos, sino al ser humano que será objeto del santo trabajo de ellos.

Se me acercó un profesional y fue quien me dio todas estas pautas que he mencionado por cuanto su seguridad es que la Depresión se cura y pudo visualizar a través de los términos de mi conferencia, que justamente la presencia y acción del muñeco derivando en una voz e imágen de fantasía la propuesta de curar del médico, podría lograr resultados más que óptimos, una nueva forma de llegar al interior de otro ser humano que además pueda estar bloqueada para recibir ayuda, sería como atravesar una difícil pared. Si es así, y si los logros se concretan, estaré más que orgulloso de ser Ventrílocuo y que esto que aparenta ser solo una habilidad actoral, se pueda convertir en una forma de ayuda a la Humanidad, Dios tiene la última palabra, Amén.