Sigue pasando el tiempo, y no arranco, pero hoy tomé al toro por las astas, sí señor, vuelvo a utilizar el blog. Tal vez tanta meditación para optar por el Regreso, sea a consecuencia que he publicado especialmente en Facebook algunos pensamientos, circunstancias vividas o eventos que al poco tiempo se diluyen sin probabilidad de rescatarlos, en cambio, de esta forma, observo que cada publicación sigue guardada ahi, pese al transcurso del tiempo que inexorable tenderá a que desaparezcan también.
Pensé varias cosas, que publicar lo que uno hace es mostrarse en cierta forma egocéntrico, sin llegar a petulante o soberbio, pero que por un lado, ¿a quién le importa lo que yo haga o deje de hacer?, mas tampoco puedo ignorar a todos aquellos que compruebo me siguen, me solicitan que publique mis cosas, me agrada que les agrade a ellos o que les parezca interesante mi pensamiento o forma de ser, sin creerme nada, simplemente un tipo que no se puede quedar quieto aún pasando por problemas de salud que exigen estar tranquilo, descansar, no promover alteraciones, y no, ahí sigo empecinado en algo que desconozco, por qué tan caprichoso o insistente, y quisiera interpretarlo como el de poseer una necesidad imperiosa no de promover cosas que hago, sino de mantener las ideas de conocer gente, lograr amigos, brindarles momentos que me hacen feliz para que les pueda servir a ellos, no persigo premios, ni honores, al contrario me agradaría vivir bajo una alfombra, desparramar felicidad en la superficie y ver feliz al mundo que me rodea desde un agujerito de esa carpeta.
Por eso y considerando el afecto recibido a menudo, a la confianza de quienes aprecian que mi cariño es real y a full time, comenzaré a publicar por este medio y luego lo transfiero al Face y ver que esos amigos se pleguen ahora al Blog y que ya no sea todo tan publico, especialmente para los que no toleran mis cosas, que no se sientan molestos, y convertir al resto de mis amigos en un círculo especial donde encontrarnos, compartir un café imaginario y lo que me encantaría es que cada tanto me manden a pasear o me critiquen, eso es algo que valoro mucho, siento que por la cíìtica, la corrección a mis equivocaciones, al rechazo de algunos pensamiento o pareceres, tengo la oportunidad de seguir creciendo, aprendiendo, a purificarme como persona para lograr un Ser Humano útil para los demás, esa es una satisfacción enorme que no se compra con toda la riqueza del mundo, entonces a partir de ahora, ¡ Aguántenme! esto es el Regreso.
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